El presidente electo Javier Milei anunció este miércoles que en los primeros meses de su mandato el país atravesará un proceso de estanflación, en el marco del fuerte ajuste fiscal que planea realizar.

Ante estas declaraciones, se espera que a partir del próximo 10 de diciembre la Argentina atraviese un periodo de alta inflación, con caída económica, lo que va a impactar severamente en el mercado interno y en el poder adquisitivo de los argentinos. Mensajero habló con Joaquín Escardó, , economista especialista en turismo; y Marcos Cohen, investigador de IERAL de Fundación Mediterránea, para analizar cómo la estanflación llegará al turismo.

“Va a haber una estanflación, porque cuando hagas el reordenamiento fiscal eso va a impactar negativamente en la actividad económica. Por eso digo que la única billetera que va a estar abierta es la de Capital Humano para dar contención a los caídos. La inflación tiene que ver con lo que vos hiciste en política monetaria hace 24 meses y eso ya fue decidido, ya fue hecho. La política monetaria actúa con rezagos”, sostuvo Milei en declaraciones a La Red.

Al respecto, Joaquín Escardó explicó que la Argentina vivirá “la peor de las situaciones” al combinar la recesión con alta inflación. “En términos turísticos, hay dos puntos que habría que ver. Lo primero es qué va a ocurrir este verano, que ya está jugado. No va a ser una señal de lo que va a ocurrir durante el año. La temporada de verano en los distintos lugares de la Argentina va a ser buena, por decisiones que ya se han tomado”, explicó a Mensajero

 Joaquín Escardó, economista especialista en turismo
Joaquín Escardó, economista especialista en turismo

En este sentido, dividió a la actividad turística entre la interna y la externa: “Todo lo que tiene que ver con el turismo interno, con recesión, con inflación, es ni más ni menos que caída de los ingresos. La gente va a tener menos plata, y además con la incertidumbre de los precios. El poder adquisitivo de la gente va a caer el año que viene y el turismo es uno de los sectores que primero se ajusta”.

En tanto, gracias al externo, algunas ciudades más acostumbradas a recibir extranjeros podrían equiparar esta situación: “No depende de lo que esté ocurriendo en Argentina, sino con el turismo internacional. Hoy la Argentina en dólares está extremadamente barata. Yo particularmente creo que la Argentina va a tener inflación en dólares en los próximos años. Vamos a ir encareciendo en dólares, eso va a tener algún impacto. Pero hay destinos argentinos que son casi 100% del mercado interno, que van a sentir más el impacto, seguramente”, explicó.

Además, recordó las medidas del Gobierno de Alberto Fernández para reactivar la industria como Previaje: “Eso, por lo que se viene diciendo, no va a existir más. Y eso tuvo un impacto: cambió la estacionalidad. No teniendo esos beneficios, hay que ver cuánto cae eso. Yo no veo un año fácil para ninguno de los sectores, incluido el turismo”, concluyó.

Por su parte, Marcos Cohen sostuvo que el escenario macroeconómico de estanflación es la situación en la que ya se encontraba la economía argentina en la actualidad, por lo cual, lo que se espera para 2024 será similar 2023, en términos de nivel de actividad no creciente y a eso se le va a adicionar una aceleración inflacionaria. 

 Marcos Cohen, Investigador de IERAL de Fundación Mediterránea
Marcos Cohen, Investigador de IERAL de Fundación Mediterránea

Sin embargo, reconoció que en el turismo la situación no será igual que para el resto de la economía y diferenció dos motivos: primero, que la inflación tiene que ver con sectores productivos, por ejemplo, el agro, que estuvo muy mal en términos de nivel de producción; mientras que el otro está relacionado a la inestabilidad macro, con los problemas en el del tipo de cambio.

“Este contexto macroeconómico adverso que genera un tipo de cambio relativamente alto para los turistas extranjeros termina siendo un factor que favorece la actividad turística. En ese escenario de estanflación con tipo de cambio bastante alto, genera una inclinación de gran parte de la población hacia el turismo interno por una cuestión de precios relativos: el costo de salir al exterior es relativamente alto”, explicó.

Asimismo, señaló que esta situación da un poco de margen de maniobra a la oferta turística local para ofrecer alternativas a los turistas. “Quizá hay un segmento de la población que en otras ocasiones hubiera salido al exterior y en este caso puede optar por opciones de turismo local”, añadió.

Para finalizar, cerró su análisis con una visión optimista: “Si lo pensamos desde otras ópticas, obviamente el contexto de estanflación implica que va a haber una negociación salarial permanente, y eso puede poner presión sobre los costos. La capacidad adquisitiva de la población está limitada, entonces hay muchos factores que pueden incidir en la actividad turística. Y aun así, puede haber oportunidades para el turismo que se desarrolla en el país, tanto de extranjero como el turismo local”.